Phytorelax Agua micelar Aloe Vera

En un paseo de “solo para mirar” en una de mis perfumerías habituales me encontré de pura casualidad con la línea de productos Aloe Vera de Phytorelax, como ahora mismo ya tengo en uso un gel de aloe vera (realmente es uno de mis productos “fondo de armario” básicos para pequeñas agresiones de la piel) mis ojos se fueron al agua micelar y me llamó la atención que tuviera un 98%  de ingredientes naturales y un precio estupendo, así que la compré para probarla.

Soy usuaria habitual de aguas micelares, siempre como segundo paso de limpieza en la noche o como único en el caso de que no me haya maquillado ni una pizca ni aplicado protector solar, y he probado ya unas cuantas distintas, mejores y peores, pero hasta ahora ninguna tan natural ¡tiene un 98% de ingredientes naturales!, ¿es tan eficaz como otras más “artificiales?, ¿realmente además de limpiar desmaquilla, hidrata y tonifica tal como promete?, os lo cuento.

¿Qué es?

Un agua micelar natural 4 en 1, para desmaquillar, limpiar, hidratar y tonificar.

Phytorelax es una marca italiana de productos de belleza naturales, este producto forma parte de la gama de aloe vera.

¿Es para mí?

 Es válida para cualquier tipo de piel incluso las más sensibles, pero siempre recuerda revisar su composición si tienes alguna alergia.

Su ingrediente clave es el jugo de aloe vera bio, que compone un 40% de la fórmula, y también contiene otros extractos de plantas como el hammamelis o la manzanilla, con propiedades calmantes. 

Se trata de un producto con más de un 98% de ingredientes naturales y que no contiene ingredientes controvertidos como los parabenos, PEG, sulfatos o aceites minerales.

Se usa aplicándolo sobre un disco de algodón y frotando la cara y contorno de ojos con suavidad, se puede aclarar o no, al gusto.

¿Qué promete?

Promete ir un paso más allá de del agua micelar  habitual, describiéndola como un agua “4 en 1” útil para desmaquillar, limpiar, hidratar y tonificar , es extremadamente delicada incluso en las pieles sensibles e intolerantes gracias a las propiedades calmantes y reparadoras del zumo de aloe vera exprimido en frío y los tensioactivos vegetales utilizados.

Esta agua micelar viene en un frasco bastante sencillo de plástico color ámbar , no me ha gustado demasiado el dispensador ya que es también muy sencillo, hay que inclinar-volcar el bote para que salga y al ser realmente un “agua” y por lo tanto muy líquida es fácil que salga demasiado y normalmente escurre alguna gota por el bote y acabas manchando el estante del baño al apoyarlo. Vale, es una bobada… pero no me gusta dejar cercos cada vez que lo uso ¡y es tan fácil de solucionar!, sería genial si viniera con otro tipo de dispensador, sugiero.

El agua micelar tiene aspecto de eso, de agua, es completamente transparente, líquida y yo no percibo ningún olor, no hace falta demasiada cantidad para empapar el algodón para limpiar la cara. ¿Y limpia?, pues la verdad es que si, ves que retira muy bien la “suciedad” de la cara (basta mirar el algodón), genial, ¿no? perooo….desde mi punto de vista no es útil como desmaquillador, tendrás que gastar varios algodones empapados frotando tu cara, lo que no me parece muy adecuado para las pieles sensibles a las que se dirige este producto. 

Esto que comento sobre su capacidad desmaquilladora desde mi punto de vista no es exclusivo de “ésta” agua micelar, no creo que ninguna sirva como buena desmaquilladora, para mí eso hay que hacerlo con una primera limpieza de base aceite o crema y un agua micelar siempre se quedará corta además de que de tanto pasar y repasar es fácil que acabes irritando tu piel.

¿Y lo de hidratar y tonificar?, a riesgo de ser una pesada (que lo soy) volveré a decir lo de siempre: a una limpiadora no le pido “propiedades tratantes” para la piel  pero es verdad que al tratarse de un agua micelar que puedes aclarar o no tras su uso (lo dejan a tu elección) podría funcionar como tónico hidratante, y es verdad que tras utilizarla si no la aclaras notas que tienes “algo” sobre la piel, no llega a ser pegajoso y la sensación pasa en unos minutos dejando la piel suave y preparada para tus otros productos. Yo como soy una maniática con lo de “notar algo en la piel” con tónicos, mist, esencias y demás, después de usar esta micelar me doy un golpe de agua o paso la toallita empapada y escurrida, pero si no eres una manías como yo la puedes dejar tranquilamente porque no resulta pesada y pasados unos minutos continúas con tu rutina.

Mi piel no es sensible habitualmente y desde luego de momento no es intolerante, pero aunque no lo puedo afirmar al 100% para esos tipos de pieles, desde mi punto de vista es una limpiadora muy suave y nada irritante, la sensación de confort es total cuando la usas.

Qué me ha gustado más

Su composición tan natural

Es muy económica para su calidad

Qué me ha gustado menos

El dispensador

No es fácil de encontrar

¿Lo volveré a comprar?

Probablemente no, pero no porque no considere que es buena sino por el afán descubridor e investigador de cosas nuevas que tengo. Me ha gustado pero no rechiflado como para volverme fiel, si tras nuevas experiencias cambia mi opinión actualizaré el post.

Lo que si haré seguro es probar otros productos de la misma gana.

Puntuación

4

¿Dónde lo he comprado?:

En Primor, tienda física y web, por 4€ los 250 ml.