
¿Por qué soy tan fan de los protectores solares japoneses? pues porque tienen mucha variedad de productos con muy alto índice de protección, tanto en SPF como en PA (si pensáis que os estoy hablando en chino, o en japonés, echad un ojo a este post), los encuentras en numerosos formatos según cuales sean tus necesidades, tanto para aplicar en ciudad, en playa o para "refrescar" la protección a lo largo del día en formato polvo, mist... y para mi, sobre todo, me han fascinado porque con protecciones muy altas ofrecen todo tipo de texturas, incluso las más ligeras e imperceptibles que podáis imaginar.
No es un secreto que estoy rendida a los protectores de Bioré (tenéis algunos posts en el blog) pero para renovar mi protección a lo largo del día no me resulta cómodo llevar el el bolso el tubo de crema, así que opto por otros formatos y estoy buscando ese producto mágico que me enamore tanto como los que ya uso , por eso hoy traigo al blog una bruma facial (mist) con protección SPF 50+ PA++++, la más alta que se puede encontrar. ¡Os cuento qué tal me ha funcionado!